viernes, 10 de octubre de 2008

anotaciones sobre octubre y el último disco de fito

ya no tengo la terraza del edificio de la calle paraguay para subir a colgar la ropa y observar el cielo-iluminado-nocturno de la ciudad. antes lo tenía y, siempre en octubre (también, hay que decirlo, en noviembre, y sólo quizá en diciembre), subía y sentía que todo estaba unido y que las canciones de infame flotaban en el aire, puesto que los colores de todo las invocaban.

escucho algunas canciones del disco de fito. lo escuché entero la primera vez. escucho bastante (mi psicólogo ha señalado cómo uso la palabra "bastante") "dos días en la vida", por la entrada de los instrumentos que no son el piano de fito, y probablemente empiece a pasar lo mismo con "la rumba del piano". ari me dijo, a propósito, que si "dos días" se impusiese nuevamente como hit tendría lugar algo interesante. lo insoportable: ese ansia de universalidad que tiene fito cuando me imagino el porcentaje de argento presente (no creo que hubiese ahí ningún madrileño, pero seguramente abundaban los latinoamericanos no argentos, yo lo vi a fito en españa y me atrevo a la inferencia) y el hecho de llamar "ciudad" a un teatro. siempre me molesta que se cobre entrada y se invoque la totalidad, pero debe ser mi marxismo tosco y omnipresente.