hoy, cuatro de la tarde. le escribo un mensajito a dos amigos: "¿ustedes están viendo lo mismo que yo?"
al minuto, una respuesta: "si te referís a la calle, sí"
a los dos minutos, otra: "estoy en palermo viendo mil chicas preciosas".
un par de horas después, me llama otro amigo y sin más especificaciones arranca: "ale, esto se me está yendo de las manos, vayamos hoy a tal fiesta...".
postales de una primavera de la que tony, el gato, es un estandarte: maúlla de una manera angustiante, angustiado por la existencia de las gatitas.